sábado, 8 de octubre de 2016

Dones Preternaturales

Dones se llaman Preternaturales: 


Inmortalidad, por la cual el hombre podría no morir. 


Impasibilidad por la cual no sentiría dolor ni pena.


Integridad por la cual el control de las pasiones estarían sujetas a la razón. 


Ciencia es decir un conocimiento sin error. 


Al crear al primer hombre a su imagen y semejanza, Dios le confirió dones extraordinarios, algunos muy por encima de la naturaleza humana: los sobrenaturales, que por la gracia divina lo tornaba participante de su propia naturaleza; y los preternaturales, comunes a la naturaleza de los ángeles, tales como la integridad, inmortalidad, impasibilidad, perfecto dominio sobre los animales y sabiduría insigne.

El don de la integridad consiste en la total inmunidad de concupiscencia desordenada. O sea, el primer hombre tenía su razón sometida al más elevado, a Dios; su apetito sensitivo no poseía ningún movimiento desordenado. Él se alimentaba para conservar su propia vida y se unía a su mujer para propagar la especie, según el mandamiento del Señor: "Procread y multiplicaos" (Gen.I, 28). Este don removía del hombre todos los obstáculos de orden moral que pudiesen impedir la vida sobrenatural de la gracia.
 

Con el don de la inmortalidad, el hombre no sufriría la muerte -que es la desagregación de los diversos elementos de toda materia viva- y viviría algún tiempo en el Paraíso Terrestre, siendo trasladado al cielo (visión beatífica), sin pasar por el terrible y doloroso transe de la muerte.

La exención de todo dolor o sufrimiento del alma y del cuerpo fue dada a través del don de la impasibilidad. Ninguna perturbación espiritual o corporal podía alterar la perfecta felicidad natural de nuestros primeros padres en el Paraíso para que su unión con Dios pudiese desarrollarse en paz y tranquilidad.

El primer hombre creado en estado de inocencia dominaba perfectamente a los animales, pues las cosas inferiores estaban sumisas a las superiores. En virtud de ese privilegio preternatural, el hombre actuaba como ministro de la Divina Providencia, haciendo que todos los seres irracionales, inferiores al hombre le obedeciesen como animales domésticos.

Además de esos dones comunes a toda la humanidad, Adán recibió, por ser el principio, maestro y cabeza de todo género humano, un intransferible y magnífico don: la Sabiduría y Ciencia excelentísimas.

Según Santo Tomás de Aquino, "como el primer hombre fue instituido en estado perfecto en cuanto al cuerpo, así también fue instituido en estado perfecto en cuanto al alma, de modo a poder luego instruir y gobernar a los otros seres" (Suma Teológica, q. 96, 1).

Como contrapartida a esos inmensos beneficios, fue presentada al hombre una prueba.

Debía él cumplir de modo eximio la ley divina, guiándose por las exigencias de la ley natural grabada en su corazón, y respetar una única norma concreta que Dios le diera: la prohibición de comer del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, plantada en el centro del Jardín del Edén (cf. Gn 2, 9-17).

Nos narra la Sagrada Escritura cómo la serpiente tentó a Eva, y como cayeron nuestros primeros padres y cómo fueron expulsados del Paraíso (cf. Gn 3, 1-23).

Por eso dice San Agustín que una vez consumada la transgresión del precepto, en el mismo instante, destituida el alma de la gracia divina, se avergonzaron de la desnudez de su cuerpo, pues sintieron en su carne un movimiento de rebeldía, como pena correspondiente a su desobediencia. Cuando la gracia abandonó el alma, desapareció la obediencia de las leyes del cuerpo a las del alma. El primer pecado fue una revuelta interna contra Dios, que rompió la sumisión de la razón a Dios y produjo la ruptura y desorden de las facultades inferiores.

Pero Dios, en su infinita misericordia, no le retiró los privilegios naturales, como describe el doctor P. Tanquerey: "Se contentó de despojarlos de los privilegios especiales que les había conferido, esto es, de los dones preternaturales: conservando pues, la naturaleza y sus privilegios naturales".

Pero, ¿por qué el pecado de Adán fue transmitido a todos sus descendientes? Porque la justicia original fue un don de Dios para toda la naturaleza humana en la persona de Adán, como cabeza de toda la humanidad. Si solo Eva hubiese pecado, la naturaleza humana permanecería intacta y conservaría todos los privilegios. Así, por el pecado de Adán -pecado original- entró el mal al mundo, como afirma el Apóstol San Pablo: "Por un hombre entró el pecado al mundo, y por el pecado la muerte" (Rm 5,12).

El pecado original abrió entre Dios y los hombres un abismo insuperable. Las puertas del Cielo se cerraron y el hombre contingente solo podía ofrecer a Dios una reparación imperfecta de la ofensa cometida. ¿Estarían, entonces, los umbrales de la felicidad eterna irrevocablemente cerrados? ¡No! Perentoriamente certifican las palabras del Apóstol: "Donde abundó el pecado, superabundó la gracia" (Rm 5,20). Dios en su infinita misericordia prometió el remedio para tal enfermedad y, en el tiempo previsto envió a Su Hijo Unigénito. "Oh feliz culpa que mereció tan gran Salvador" (MISSALE ROMANUM, 2008, p.348).

El propio Creador se hizo criatura para, con una generosidad inefable, saldar nuestra deuda. El Hijo "haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz" (Fl 2, 8), restituyó al hombre la gracia perdida con el pecado y nos abrió las puertas del cielo.



jueves, 6 de octubre de 2016

Vasos Consagrados: el Vaso del alfarero

"¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Pues por precio habéis sido comprados; por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios."

                                                                                                           --  1 Co 6:19-20




La Biblia se refiere a nosotros como vasos de barro, frágiles, humanos (vea 2 Co 4:7). Como se forma la vasija en la rueda del alfarero, así mismo nosotros somos hechos del barro (vea Is 64:8). 

La vasija de barro

 
En Jeremias 18:6,7 leemos: "Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo: ¿No puedo yo hacer con vosotros, casa de Israel, lo mismo que hace este alfarero?--declara el SEÑOR. He aquí, como el barro en manos del alfarero, así sois vosotros en mi mano, casa de Israel. En un momento yo puedo hablar contra una nación o contra un reino, de arrancar, de derribar y de destruir;"

En Salmo 2,9 leemos: "Los quebrantarás con vara de hierro; Como vasija de alfarero los desmenuzarás."

Dios formó a Adán "del polvo de la tierra" (Gn 2:7) y el Salmo 103:14 expresa, "Porque él [Dios] conoce nuestra condición; se acuerda de que somos polvo".

A pesar de que somos débiles e imperfectos, cuando llenamos nuestras vasijas (nosotros mismos) con la Palabra de Dios, nos convertimos en recipientes de su bendición, listos para ser llenados para su uso. Todos somos valiosos para el Señor--¡Dios aún puede usar vasijas rotas!
Cuando Él llamó a Jeremías, le dijo, "Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones". Como Jeremías, podemos ofrecer la verdad de Dios a la gente dondequiera que vayamos.
Pero primero debemos estar enteramente consagrados a Dios. En 2 Timoteo 2:21 se declara, "Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra".
Una clave importante para que seamos vasos útiles es controlar nuestras lenguas. El Salmo 50:23 nos dice, "El que sacrifica alabanza me honrará; y al que ordenare su camino, le mostraré la salvación de Dios". 

¿Sabe qué sucedería si cada día le damos nuestras bocas a Dios para que sólo salgan de nuestros labios palabras que le glorifiquen? El Salmo 34:13 nos advierte, "Guarda tu lengua del mal, y tus labios de hablar engaño". Dedique su boca a Dios y úsela solamente para aquello que le place a Él--para alabanza y adoración, edificación y exhortación, y dar gracias. Ponga sus labios en el altar cada mañana. Déle su boca a Dios orando su Palabra: "Señor, abre mis labios, y publicará mi boca tu alabanza" (Sal 51:15).
Mucha gente quiere recibir de Dios, pero no están dispuestos a darse ellos mismos por completo a Él. La parábola de los talentos nos instruye a usar lo que Dios nos da para expandir el Reino del Maestro (vea Mt 25:14-30).
Haga un compromiso nuevo de ser un dador e invertir su tiempo y dinero, y darse usted mismo en la obra del Señor. No permita que el diablo le susurre y le inhiba dar porque usted tenga deudas y obligaciones que cumplir, cosas por las cuales usted se preocupa. Jesús nos exhorta a no estar preocupados o ansiosos por nada, porque Dios conoce nuestras necesidades y promete cuidar de nosotros (vea Mt 6:25-34). 

Proverbios 3:9-10 declara, "Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto". Pablo declaró que los creyentes en Macedonia no sólo dieron su dinero, sino también se dieron ellos mismos al servicio del Señor (vea 2 Co 8:1-5). Pablo también dio su vida en el servicio al pueblo de Dios. 

Alguien necesita su vida hoy. Ofrézcase usted mismo(a) a Dios, y deje que Él le muestre quién necesita ser servido o ministrado por Él. Bríndele todo su ser, todo lo que espera ser, todos sus sueños, visiones, esperanzas y deseos. Hágalo a Él dueño de todo y Él le demostrará su poder a través de su vida. 


Si nunca ha dedicado su vida al servicio del Señor, Usted se está perdiendo una gran aventura. Diariamente Usted necesita entregarse por completo a Dios. Diga: "Señor, yo soy tuyo(a), "
Habla, que tu siervo escucha."1 Samuel 3:9 .

REPITE esta Oración: "Quiero ser un vaso perfecto para tu uso. Dedico mi vida a tu servicio. Te entrego mis manos, mi boca, mi mente, mi cuerpo, mi dinero y mi tiempo. Haz conmigo lo que quieras hacer hoy".


Puedes pedirle perdón por tus pecados:
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!






miércoles, 5 de octubre de 2016

Nombres Hebreos partícula EL

 Existen varios nombres bíblicos que incuyen la partícula EL , uno de los nombres de Dios, algunos ejemplos son : Daniel, Uriel, Miguel, Zorobabel, Joel, Ezequiel, Nataniel, Emmanuel, Isabel , Ariel, Raquel, Elias, Eli, Eliseo, etc.

Hoy le daremos un vistazo a estos nombres.

En Biblia: El y Yahvé.

En español hay bastantes nombres de origen bíblico que usan el afijo “el”, (casi siempre como sufijo y alguna vez como prefijo), que en hebreo significa “Dios” (el dios El, el principal dios ugarita, de la zona actual de Siria y Jordania, que se integró en la onomástica hebrea que pasó después al cristianismo). Suelen ser nombres de ángeles y arcángeles, aunque no siempre, y la mayoría de las veces, de género masculino.

Y como era de esperar:

    No todos los nombres de origen hebreo incluyen el afijo “el”, pero aquí me fijo sólo en esos.
    No todos los nombres de origen hebreo que incluyen el afijo “el” tienen un significado relacionado con dios: Raquel, “oveja”, o Abel.
    No todos los que terminan en “el” son de origen hebreo: Fidel (latín, “fiel”), Anabel (italiano, Ana + Bella), Ángel (griego, “mensajero de Dios”), Arcángel (griego, “príncipe de todos los ángeles”), Manuel (latín, “Dios con vosotros”, variante de Emmanuel, Imanol).

Es curioso que nombres como Ángel, Arcángel o Manuel, tengan un significado relacionado con Dios, terminen en “el” y sin embargo, el origen sea latino y no hebreo. Pero bueno…

Ariel: (masc. y fem.) “León de Dios”.
Carmelo: (del monte bíblico Carmelo, Karem El), “viña de Dios”.
Daniel: “Justicia de Dios”.
Elías: “Mi dios es Yahvé”.
Elisa: Dios ha ayudado.
Elizabeth: “Dios ha ayudado”. Variante anglosajona de Elisa. Ver Isabel.
Eloy: El sublime.
Elsa: Combinación de Elisa y Elizabeth. “Dios da”. Variante germana de Elisa.
Emmanuel: Variante de Manuel, Imanol. “Dios con vosotros”.
Ezequiel: “Dios fortalece”.
Gabriel: “Hombre de Dios” o “fuerza de Dios”.
Isabel: “Promesa de Dios”. Quizá del latín “Isis” (diosa egipcia) + bella.
Ismael: “Dios ha oído”.
Israel: “El que lucha con Dios”.
Mabel: Unión de María la elegida, la amada por Dios e Isabel “Baal es la salud”.
Maribel, Maribela, Mariel: Nombre compuesto por Maria La elegida, la amada por Dios, e Isabel del hebreo “Baal es la salud”.
Massiel: “La que baja de las estrellas”.
Michel: “Dios es justo”. Variante de Miguel.
Michelle: “Dios es justo”. Variante de Micaela.
Miguel: “¿Quién es como Dios?”. Nombre de un arcángel.
Nataniel: “Regalo del Señor”.
Rafael: “Medicina de Dios” o “Dios ha obrado la salud”. Nombre de un arcángel.
Samuel: “Dios ha oído”.


Por ejemplo tenemos a Juan el Bautista: Padre Zacarias, madre Isabel y Juan como Hijo:
Significan: Dios recuerda su promesa de Gloria.



Puedes pedirle perdón por tus pecados:
 
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!

Cristo: nombre glorioso Letra y Música


CRISTO NOMBRE GLORIOSO
          (Jn. 1, 14)
A
RE                                FA#m
Cristo, nombre glorioso,
                  SOL
precioso Salvador,
               LA7
bello Señor.
RE                                         FA#m
Emmanuel Dios con nosotros,
               MIm  LA7
Palabra viva,
                  RE
mi Redentor.
 
 


YouTube VIDEO Cristo: nombre glorioso Letra y Música




Letra: Cristo, nombre glorioso


 Canciones/Himnos
Cristo, nombre glorioso
Salvador bello, precioso Señor,
Emanuel, Dios con nosotros,
Pan de la Vida, Cordero de Dios.

Cristo, nombre glorioso,
Alfa y Omega, Eterno Yo Soy,
Creador, Omnipotente,
Rey de los siglos, el Gran Vencedor



Puedes pedirle perdón por tus pecados:
 
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!

lunes, 13 de junio de 2016

Como Dibujar a Jesucristo


 Dibujos de Jesucristo para colorear












 
Dibujar a Jesucristo  Transfiguración Monte Tabor













Dibujar a Jesucristo en la Cruz


Jesucristo entra en Jerusalem: Domingo de Ramos

Resurrección de Jesús



Traición de Judas Iscariote


Jesús y su Madre La Virgen María


..Y predicad Mi Evangelio

 VIDEO cómo dibujar a Jesucristo.











 

viernes, 10 de junio de 2016

Hablemos siempre de forma Edificante

Cómo es nuestro hablar. Hablemos siempre de forma edificante

"...de la abundancia del corazón habla la boca."  ( Mt 12,34 )

"Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado." ( Mt 12,37 )


“No proceda de la boca de ustedes ningún dicho corrompido, sino todo dicho que sea bueno para edificación [del prójimo].” (EFESIOS 4:29.)

Las palabras que frecuentan tu boca hablan de lo que hay en tu corazón, se puede saber mucho acerca de como es una persona realmente con tan solo dejarla hablar un rato.

 a) ¿Qué regalo nos ha hecho YHWH, y cómo puede usarse mal?
 b) Si queremos mantenernos en el amor de Dios, ¿cómo tenemos que usar el don del habla?
SUPONGAMOS que le regalamos un automóvil a un ser querido y este decide usarlo mal, conduciendo de forma irresponsable y haciendo daño a otras personas. ¿Cómo nos sentiríamos? Sin duda, muy decepcionados.
 
Pues bien, YHWH es el origen de “toda dádiva buena y todo don perfecto” (Santiago 1:17). Por ejemplo, nos ha regalado algo que nos distingue de los animales y que nos permite expresar nuestras ideas y sentimientos: la facultad del habla. Pero este regalo, como el automóvil de la comparación, puede usarse mal. De hecho, muchas personas lo emplean de forma irresponsable y hacen daño a los demás. ¿Comprendemos, entonces, lo decepcionado que debe sentirse YHWH?

 Si queremos mantenernos en el amor de Dios, tenemos que usar este don como él quiere. O lo que es igual, tenemos que seguir las instrucciones que ha dejado en la Biblia: “No proceda de la boca de ustedes ningún dicho corrompido, sino todo dicho que sea bueno para edificación [del prójimo] según haya necesidad, para que imparta lo que sea favorable a los oyentes” (Efesios 4:29). Por eso, a continuación examinaremos qué tipo de lenguaje hemos de evitar y cómo podemos usar el don del habla para edificar a nuestros semejantes. Pero, antes de nada, veamos por qué es tan importante controlar la lengua.

Lea Jeremías capítulo 18. ¿Qué es lo que Ud. vierte en ese vaso?
Ver Rev 17,4 "...copa de oro llena de abominaciones y de las inmundicias de su lujuria."
¿Es Ud. como la higuera en Lu 13,6-9?

¿POR QUÉ CONTROLAR LA LENGUA?


¿Qué dicen varios proverbios bíblicos sobre el poder de las palabras?
 La primera razón para controlarnos al hablar es el gran poder de las palabras. A este poder alude Proverbios 15:4: “La calma de la lengua es árbol de vida, pero el torcimiento en ella significa un quebrantamiento del espíritu”.* Las palabras calmadas de una lengua bondadosa son tan refrescantes como el rocío y tan reconfortantes como un bálsamo. En cambio, los comentarios malintencionados de una lengua perversa le aplastan el ánimo a cualquiera. Como vemos, las palabras pueden herir o pueden curar (Proverbios 18:21).

 El poder de las palabras también se ilustra en Proverbios 12:18. Allí se indica que quien “habla irreflexivamente” es como quien da “estocadas [con] una espada”. Al soltar las cosas sin pensar, causa profundas heridas y echa a perder buenas amistades. En efecto, las palabras pueden dolernos más que si una espada nos atravesara el corazón. Pero, como añade el proverbio, también pueden tener el efecto contrario: “La lengua de los sabios es una curación”. Quien se esfuerza por demostrar la sabiduría divina mide bien lo que dice. Con sus comentarios bondadosos sana corazones heridos y restablece buenas relaciones. Sin duda, todos hemos constatado el poder curativo de las palabras (Proverbios 16:24). Lo que sale de nuestros labios tiene mucha fuerza; usémoslo, por tanto, no para lastimar al semejante, sino para aliviarlo.

Las palabras calmadas son como rocío refrescante

 ¿Por qué cuesta tanto refrenar la lengua?

 Pero, por más que intentemos hablar con cuidado, a veces fracasaremos. Y este hecho nos muestra la segunda razón para controlarnos al hablar: la tendencia innata a hacer mal uso de la lengua. En efecto, nos cuesta mucho refrenarla porque las palabras proceden del corazón y, según indica la Biblia, “la inclinación del corazón del hombre es mala” (Génesis 8:21; Lucas 6:45; Santiago 3:2-4). Ahora bien, aunque la imperfección nos impide dominar la lengua por completo, sí podemos manejarla mejor. Para ello tendremos que realizar un esfuerzo constante, como si estuviéramos nadando contra la corriente. Ver Juan capítulo 12.

 ¿Hasta qué punto somos responsables ante YHWH de lo que decimos?

 La tercera razón para controlarnos al hablar es la responsabilidad que tenemos ante YHWH. Lo que decimos no solo influye en la convivencia con los demás, sino también en nuestra relación con Dios. Así lo indica Santiago 1:26: “Si a un hombre le parece que es [un buen] adorador [...], y con todo no refrena su lengua, sino que sigue engañando su propio corazón, la forma de adoración de este hombre es vana”.* Como se explicó en el capítulo anterior, existe una estrecha relación entre el uso que hacemos del lenguaje y nuestra adoración. Si diéramos rienda suelta a la lengua e hiciéramos comentarios hirientes y llenos de veneno, el servicio que rendimos a Dios no tendría ningún valor. Sin duda, esto debería darnos mucho que pensar (Santiago 3:8-10).

 Hemos visto tres razones de peso para controlarnos en el uso de las palabras. Ahora examinaremos cuál es el lenguaje que debemos evitar por completo y cuál debemos emplear para edificar a nuestros semejantes.

PALABRAS QUE DERRUMBAN


a) ¿Qué lenguaje se ha vuelto una plaga?
b) ¿Por qué debemos rechazar el lenguaje sucio?
 Lenguaje soez. En la actualidad, las blasfemias, las groserías y las vulgaridades de todo tipo se han vuelto una plaga. Muchas personas recurren a ellas para añadir fuerza a lo que dicen o para compensar su limitado vocabulario. Y en el mundo del espectáculo, los humoristas se valen de palabrotas y chistes subidos de tono para entretener al público. Pero eso no tiene ninguna gracia. Hace dos mil años, Pablo envió a los cristianos de Colosas una carta inspirada donde les aconsejó evitar por completo el “habla obscena” (Colosenses 3:8). Y a los hermanos de Éfeso les escribió: “Ni siquiera se mencionen entre ustedes [cosas como el] bromear obsceno” (Efesios 5:3, 4).
 A nuestro amado Dios le ofende el lenguaje sucio. Por eso, nosotros también lo detestamos y nunca lo utilizamos. Tenemos muy claro que puede ser una forma de “inmundicia”, la cual figura entre las “obras de la carne” condenadas por Pablo (Gálatas 5:19-21). Sin duda, es un asunto muy serio. ¿Qué le sucederá a quien tenga el vicio de andar siempre hablando de temas gravemente inmorales, indecentes o pervertidos, sea de forma descarada o valiéndose de dobles sentidos? En primer lugar, recibirá varias advertencias. Y si se niega a arrepentirse y corregirse, será expulsado de la congregación.*

c) ¿Cuándo están mal los comentarios sobre las vidas ajenas?
d) ¿Por qué debemos evitar las calumnias?
Chismes y calumnias. Los comentarios sobre las vidas ajenas pueden ser inofensivos si giran en torno a asuntos positivos o útiles, como quién se acaba de bautizar o quién necesita ánimo. Los cristianos del siglo I también se interesaban mucho por sus hermanos y hablaban de ellos sin ninguna malicia (Efesios 6:21, 22; Colosenses 4:8, 9). Lo que no está bien es hacer comentarios que distorsionen la realidad o revelen detalles de la vida privada. Esa costumbre pudiera llevarnos incluso a algo más grave: la calumnia, que se define como “acusación falsa hecha maliciosamente en contra de alguien con el fin de dañarlo o desprestigiarlo” (Diccionario del español usual en México). Como ejemplo de claras calumnias, tenemos las mentiras que lanzaron los fariseos contra Jesús con la intención de desacreditarlo (Mateo 9:32-34; 12:22-24). Un hecho innegable es que las calumnias generan muchas discordias (Proverbios 26:20.)

¿Cómo ve YHWH a quienes se dedican a difamar o sembrar discordias? 


No los ve con buenos ojos. Lo que es más, odia a quienes provocan “contiendas entre hermanos” (Proverbios 6:16-19). Recordemos que el término griego para “calumniador” es diábolos, el mismo que se usa para presentar a Satanás como el “Diablo”, es decir, como el Calumniador que difama a Dios (Revelación 12:9, 10). Desde luego, ninguno de nosotros querría convertirse en un “diablo” (o sea, en un calumniador). Ciertamente, en la congregación no hay lugar para la calumnia ni para las obras de la carne que esta fomenta, entre ellas las “altercaciones [o riñas]” y las “divisiones” (Gálatas 5:19-21). Así pues, antes de contar cualquier cosa sobre el prójimo, debemos preguntarnos: “¿Estoy seguro de que es cierto? ¿Sería una muestra de amor revelarlo? ¿Es necesario o conveniente que otros se enteren?” (1 Tesalonicenses 4:11).

e) ¿Cómo afecta a las personas el lenguaje injurioso?
f) ¿En qué peligrosa situación se encuentran los injuriadores?
Maltrato verbal. Como ya vimos, las palabras pueden hacer mucho daño. Y es cierto que la imperfección nos lleva a todos a decir cosas que luego lamentamos. Pero la Biblia nos advierte que hay una forma de hablar que no es admisible ni en la congregación ni en la familia. Pablo exhortó a los cristianos: “Que se quiten toda amargura maliciosa y cólera e ira y gritería y habla injuriosa” (Efesios 4:31). Otras traducciones bíblicas vierten “habla injuriosa” como “insultos”, “ofensas” y “lenguaje insultante”. Esta forma de hablar —que incluye las palabras humillantes, los comentarios ásperos y las críticas despiadadas— atenta contra la dignidad y la autoestima de las personas. Y los niños, al ser más inocentes y tiernos, son especialmente vulnerables (Colosenses 3:21).

 La Biblia condena tajantemente a los injuriadores y muestra que se encuentran en una situación muy peligrosa. ¿Qué futuro le espera a quien tenga la costumbre de emplear expresiones insultantes, despectivas o humillantes? Primero recibirá varias oportunidades de corregirse. Pero si no las aprovecha, terminará expulsado de la congregación. Y peor aún, hasta pudiera perder la vida eterna bajo el Reino de Dios (1 Corintios 5:11-13; 6:9, 10). Queda claro, que mantenerse en el amor de YHWH es incompatible con las groserías, con las mentiras, con los insultos y, en definitiva, con todas las palabras que derrumban al prójimo.


PALABRAS QUE EDIFICAN . ¿Qué tipo de lenguaje edifica al prójimo?


 

¿Cómo quiere YHWH que usemos el don del habla? Recordemos que la Biblia nos pide que lo utilicemos “para edificación [del prójimo]” (Efesios 4:29). A YHWH le complace que nos esforcemos por hallar palabras constructivas que animen y fortalezcan. Pero las Escrituras no contienen un reglamento detallado ni una lista con vocabulario “saludable” (Tito 2:8). Para saber si un comentario es edificante solo hay que ver si pueden aplicársele estos tres adjetivos: sano, cierto y bondadoso. Tengamos presentes estas tres importantes características mientras analizamos varios ejemplos (véase el recuadro “¿Es edificante mi forma de hablar?”).

Pregúntese: ¿ES EDIFICANTE MI FORMA DE HABLAR?


Ser Cristiano significa ser "pequeños Cristos", así nuestro proceder debe ser puro en todo momento y lugar: " Jesús decia: Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen."Lu 23,34

Principio: “Que su habla siempre sea con gracia” (Colosenses 4:6).

Preguntas para meditar

¿Cuándo fue la última vez que felicité a alguien por su labor? (1 Corintios 11:2; Revelación 2:1-3.)
¿Demuestro respeto a los demás pidiendo las cosas con cortesía y dándoles las gracias? (Génesis 13:14; Juan 11:41.)
Buenos Días , por favor, Gracias. ¡Dios te bendiga!  ¿se hallan en su repertorio de palabras diariamente usadas?

¿Hablo casi siempre de mí mismo, o me intereso también por las ideas y sentimientos de los demás? (Filipenses 2:3, 4; Santiago 1:19.)

¿Para qué empleo la información que tengo sobre las vidas ajenas? ¿Para edificar, o para derrumbar? (Proverbios 15:1, 2.)
RECUERDE: lo que dice habla de lo que hay en su corazón, habla de quién es Ud.

¿Qué actitud demuestro hacia el lenguaje soez?, ¿Qué revela esa actitud sobre lo que tengo en el corazón? (Lucas 6:45; Santiago 3:10, 11.)

 a) ¿Por qué debemos felicitar a los demás?
 b) ¿Qué comentarios elogiosos podemos hacer en la congregación y en el hogar?
Elogios sinceros. YHWH y Jesucristo saben que es muy necesario felicitar a los demás y reconocer sus méritos (Mateo 3:17; 25:19-23; Juan 1:47). Y todos los cristianos tenemos que hacer lo mismo, ser como Jesucristo: Lea Mt 5,48.
En efecto, “una palabra a su tiempo [...], ¡oh, cuán buena es!” (Proverbios 15:23). Cuando alguien nos elogia con sinceridad, nos hace sentir bien y nos llena de ánimo. Y es muy natural que nos sintamos así, pues se está interesando por nosotros y por lo que estamos haciendo. Eso nos confirma que ha valido la pena el esfuerzo, fortaleciendo nuestra confianza e impulsándonos a trabajar cada día con más entusiasmo. Pues bien, dado que las alabanzas son algo que a todos nos gusta recibir, ¿no deberíamos preocuparnos también por darlas? (Mateo 7:12.)

Si nos acostumbramos a fijarnos en los puntos fuertes de los demás, siempre encontraremos razones para felicitarlos. Por ejemplo, ¿qué pudiéramos ver en la congregación? A un orador dando buenos discursos, a un joven luchando por lograr sus metas espirituales o a un hermano mayor que, pese a sus achaques, nunca falta a las reuniones. Unas sencillas palabras de elogio les llegarán al corazón y los fortalecerán. ¿Y qué puede decirse del hogar? Ambos cónyuges necesitan escuchar sentidas palabras de ánimo y gratitud (Proverbios 31:10, 28). Y a los hijos también les hace falta que los tengan en cuenta y los aprecien. Para ellos, el reconocimiento y la aprobación son tan necesarios como el agua y la luz para las plantas. Por eso, los padres deben estar muy pendientes de elogiarlos por sus buenas cualidades y acciones. Así les elevarán la autoestima y la confianza, y los moverán a esforzarse aún más por hacer lo que deben.
 

¿Por qué debemos hacer todo lo posible por consolar y animar a nuestros hermanos, y cómo podemos hacerlo?


Consuelo y ánimo. YHWH se interesa profundamente por los de “condición humilde” y por “los [...] aplastados” (Isaías 57:15). En la Biblia nos dirige esta exhortación: “Sigan consolándose unos a otros y [...] hablen confortadoramente a las almas abatidas” (1 Tesalonicenses 5:11, 14). Podemos estar seguros de que él observa complacido todo lo que hacemos por animar y consolar a los afligidos.


A YHWH le complace que usemos palabras edificantes
¿Qué podemos hacer por el cristiano desanimado? Primero, dirigirle algunas palabras de aliento. Aunque con eso quizás no arreglemos sus problemas, no debemos preocuparnos. Lo importante es mostrarle que estamos a su lado y que nos interesamos. También podemos orar con él, pidiendo a YHWH que le ayude a ver que es alguien muy querido, tanto por los demás como por Dios (Santiago 5:14, 15). Debemos confirmarle que la congregación lo necesita y aprecia (1 Corintios 12:12-26). Otra buena idea es leerle algún pasaje bíblico que le recuerde cuánto se interesa YHWH por él (Salmo 34:18; Mateo 10:29-31). Si nos tomamos el tiempo necesario para confortarlo con alguna “buena palabra” que salga de nuestro corazón, se sentirá más amado y valorado (Proverbios 12:25).

¿Qué tres factores contribuyen al éxito de los consejos?


Buenos consejos. Como todos somos imperfectos, pecadores de vez en cuando necesitaremos orientación. Por eso la Biblia nos dice: “Escucha el consejo y acepta la disciplina, a fin de que te hagas sabio en tu futuro” (Proverbios 19:20). En la congregación recibimos sugerencias de los ancianos. Pero ellos no son los únicos capacitados para hacerlas. Por ejemplo, los padres tienen que asesorar a sus hijos (Efesios 6:4). Y las hermanas espiritualmente maduras pueden hacer lo mismo con las cristianas más jóvenes (Tito 2:3-5). En todo caso, el amor al prójimo dicta que el consejero formule sus comentarios de forma que nadie se sienta atacado. Analicemos ahora tres factores que contribuyen al éxito del consejo: que se dé con la debida actitud y motivación, que tenga bases sólidas y que se ofrezca de la forma adecuada.

El primer factor es que el consejo se dé con la debida actitud y motivación. ¿Qué nos ayuda a aceptar con gusto una sugerencia? Sin duda, saber que se ofrece por verdadero interés en nosotros, y no por frustración o por egoísmo. Entonces, actuemos así al dar consejo a los demás. El segundo factor es basarse en la Palabra de Dios (2 Timoteo 3:16). Todo lo que digamos debe estar fundamentado en la Biblia, sea que leamos directamente de ella o no. Los ancianos tienen cuidado de no imponer sus propias opiniones. Tampoco manipulan textos bíblicos para respaldar sus ideas. El tercer factor es ofrecer la recomendación de la forma adecuada. Al darla con bondad, respetando la dignidad de cada uno, siempre será más fácil aceptarla (Colosenses 4:6).

¿De qué manera queremos usar el don del habla?


 Sin duda, al dotarnos del habla, YHWH nos ha hecho un regalo valiosísimo. Y como amamos tanto a nuestro Padre, queremos usarlo bien. Nunca olvidemos que las palabras pueden edificar o derrumbar. Por eso, usémoslas siempre como YHWH quiere: “para edificación [del prójimo]”. Así, seremos una verdadera bendición para quienes nos rodean y, además, podremos mantenernos en el amor de Dios.

El término hebreo que se emplea  en Proverbios 15:4 se traduce “torcimiento” también puede verterse, e.d. traducirse,  en “malicia” o “perversidad”.

La palabra griega traducida “vana” también se vierte “inútil” e “infructuosa” (1 Corintios 15:17; 1 Pedro 1:18).

En la Biblia, el término “inmundicia” engloba pecados muy diversos. Aunque no todos los tipos de inmundicia exigen la formación de un comité judicial, quien cometa inmundicia grave y no se arrepienta será expulsado de la congregación (2 Corintios 12:21; Efesios 4:19;)






Recuerda siempre estas palabras:



"Si alguno oye mis palabras y no las guarda, yo no lo juzgo; porque no vine a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo.  El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene quien lo juzgue; la palabra que he hablado, ésa lo juzgará en el día final."
                                                                                    --
Juan 12:47-48



Puedes pedirle perdón por tus pecados:
 
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!



jueves, 9 de junio de 2016

¡Gloria a Dios Aleluya!


Letra de : Aleluya Gloria a Dios

Mi             La
/Alelu, alelu, alelu, aleluya
  Si7       Mi
Gloria al Señor./

              Si7
1. Gloria al Señor, aleluya.
              Mi
Gloria al Señor, aleluya.
             La7
Gloria al Señor, aleluya.
   Si7        Mi
Gloria al Señor.

2. Gracias Señor, Aleluya

3. Gloria al Señor nuestro Padre
Gloria al Señor Jesucristo
Gloria al Espíritu santo
Gloria al Señor.






Puedes pedirle perdón por tus pecados:
 
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!

miércoles, 8 de junio de 2016

Pescador de Hombres


Letra de la canción Pescador de Hombres

Tú has venido a la orilla,
no has buscado ni a sabios ni a ricos.
Tan sólo quieres que yo te siga.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar.

Tú sabes bien lo que tengo,
en mi barca no hay oro ni espada,
tan sólo redes y mi trabajo.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar.

Tú necesitas mis manos,
mi cansancio que a otros descanse,
amor que quiera seguir amando.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar.

Tú, pescador de otros lagos,
ansia eterna de hombres que esperan.
Amigo bueno que así me llamas.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar


VIDEO de la canción Pescador de Hombres 

 


Puedes pedirle perdón por tus pecados:
Señor Jesús yo te pido perdón por todos mis pecados, se que has muerto en una cruz por amor a , y que Dios Padre te resucito de entre los muertos al tercer día; lávame, límpiame de mi maldad con tu sangre preciosa, te necesito, te declaro el Señor y Salvador de mi vida, enséñame hacer tu voluntad, dame fuerzas, dame una nueva vida; yo doy gracias a Dios el Padre por haberte enviado a mi Jesús a morir por mis pecados y por recibirme como tu hijo. En tu nombre Jesús he orado, Amen.-
Si usted ha hecho esta oración, Lea la Biblia, busque a Dios en oración, Dios le escucha y el responde las oraciones; y busque una Iglesia donde se le predique la palabra de Dios. 
 "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.  Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación."
                                                                                                             --Rom 10, 9-11

" Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. "
                                                                                                                -- Mt 18,19

No hay amor mas Grande: " Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros."
                                                                                                             --Romanos 5:7-8

¡Dios puede sanarte y si lo crees puede ser hoy! 

¡Dios te Bendiga!



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